Iglesias de Pescocostanzo
Pescocostanzo, un pintoresco pueblo de montaña en los Abruzos, es uno de los lugares más bellos de Italia central. El centro histórico se encuentra a unos 1.400 metros de altura y impresiona con su imagen urbana barroca, callejuelas estrechas e iglesias artísticamente decoradas. Quien esté en un recorrido en cabrio por Italia, debe incluir Pescocostanzo como una parada obligatoria. El lugar combina profundidad cultural con belleza paisajística y es un punto de partida ideal para explorar el mundo montañoso del Parque Nacional de la Majella.
Las iglesias de Pescocostanzo – Testigos de fe y arte
Uno de los monumentos más significativos del lugar es la Collegiata di Santa Maria del Colle, que fue construida en el siglo XV y más tarde ampliada en el estilo del barroco romano. Se alza en la plaza central y impresiona con su elegante fachada y su magnífico interior. Especialmente dignos de ver son el techo de madera con adornos tallados, los hermosos frescos y el altar mayor ricamente decorado. Al entrar en la iglesia, se siente de inmediato la conexión entre historia, arte y espiritualidad que hace de Pescocostanzo un destino de viaje extraordinario.
Además de la Collegiata, también vale la pena visitar iglesias más pequeñas en los alrededores. Cerca del centro del pueblo se encuentra la Chiesa di Santa Maria del Suffragio, que destaca por su sencilla belleza y su ubicación en el borde del casco antiguo. Aquí no solo se disfruta de tranquilidad y recogimiento, sino también de una magnífica vista sobre las colinas y valles circundantes.
Pescocostanzo – parada ideal en un viaje en cabrio por los Abruzos
El trayecto hacia Pescocostanzo es una experiencia en sí misma. Carreteras de montaña sinuosas, amplias vistas panorámicas y una atmósfera incomparable hacen del viaje un punto culminante de cualquier excursión en cabrio. Especialmente en primavera y verano, cuando los prados alrededor del pueblo están en plena floración, la región despliega su particular encanto. El casco antiguo bien conservado invita a aparcar el cabrio y explorar las encantadoras calles a pie.
Una ruta en cabrio por los Abruzos se puede combinar maravillosamente con otros destinos como Sulmona, Scanno o Roccaraso. Estos lugares no solo ofrecen diversidad paisajística, sino también descubrimientos culinarios y culturales. Pescocostanzo es un lugar donde la historia sigue viva – en sus iglesias, en sus plazas y en la hospitalidad de sus habitantes.
