Enfocado en cabrios
Rutas seleccionadas a mano
Open Horizons Logo

Castillo de Chenonceau

Castillo de Chenonceau

El Château de Chenonceau, también conocido como el „Castillo de las Damas“, es uno de los edificios más elegantes del Loira. Con su singular arquitectura que se extiende sobre el río Cher, combina historia, arte y belleza paisajística de manera impresionante. Dentro del recorrido en cabriolet „Sueño en Cabrio a lo largo del Loira“, rápidamente se convierte en una de las paradas más pintorescas - un lugar hecho a medida para una pausa con el techo abierto.

Arquitectura que flota sobre el río

Ya al aproximarse se llega a uno de los castillos más extraordinarios de Europa. La larga galería sobre el río parece casi surrealista, como si se hubiera desprendido de un cuadro. Desde el aparcamiento, un sendero sombrío atraviesa cuidados jardines, flanqueados por plátanos, llevando directamente al recinto del castillo. Y mientras la vista se desliza sobre los puentes de arco, toda la fachada se refleja de manera pintoresca en el agua - una vista que deja asombrados incluso a los viajeros más experimentados.

Quienes viajan en cabriolet experimentan la belleza del paisaje de manera particularmente intensa. Las sinuosas carreteras alrededor de Chenonceaux ofrecen amplias vistas de campos, bosques y viñedos. Especialmente en las horas de la mañana o justo antes del atardecer, se crea un juego de luces y colores que otorga a la conducción por el valle del Loira una cualidad casi cinematográfica.

Una parada elegante en el „Sueño en Cabrio a lo largo del Loira“

El Château de Chenonceau es un lugar ideal para añadir un hito cultural a la conducción durante algunas horas. El recorrido en cabriolet „Sueño en Cabrio a lo largo del Loira“ está marcado por arquitectura histórica y placeres culinarios - Chenonceau reúne ambas cosas. En el interior del castillo, uno pasea por salas llenas de historia, que alguna vez fueron moldeadas por Diane de Poitiers y Catalina de Médici. En el parque del castillo, los jardines al estilo francés invitan a pasear, mientras se escucha el murmullo del río.

Un picnic a la orilla del río, un breve paseo por las avenidas de árboles o simplemente el hecho de permanecer al lado del agua - todo esto convierte a Chenonceau en un lugar donde parece que el tiempo se detiene. Quien continúe su camino no solo lleva consigo imágenes, sino también un rastro de poesía para el resto del trayecto.